Bajo la consigna, «NI PERDÓN, NI OLVIDO, CASTIGO PARA TODOS LOS RESPONSABLES», representantes de organismos de derechos humanos de Boyacá y Casanare, fundaciones de paz, resguardos indigenas, movimientos sociales, organizaciones eclesiásticas, colectivos de abogados, comunidades veredales y urbanas, funcionarios públicos y privados y ciudadanía en general, recuerdan a las 15 victimas ejecutadas infamemente por grupos paramilitares hace 11 años en la masacre del páramo de la Sarna.
Con una peregrinación al lugar de los hechos, denominada: «CANTO A LA VIDA, PARA NO OLVIDAR A NUESTROS MUERTOS», se hace un acto de reconciliación y reparación en memoria de los inocentes, se oficia una eucaristía y se recuerda a las víctimas mediante una breve reseña de sus vidas.
La repudiada «Masacre de la Sarna» ocurrió el primero de Diciembre de 2001 en el sitio conocido como “La Sarna”, sector Melgarejo, a unos 30 kilómetros de Sogamoso, donde un grupo de hombres armados detuvo la marcha del bus de la empresa Cootracero, que cubría la ruta Sogamoso – Labranzagrande, obligó al conductor a atravesarlo en la carretera y a sus ocupantes a descender, para seguidamente separarar a los dos niños y a una anciana que hacía parte de los pasajeros y luego obligar a las restantes quince personas (12 hombres y 3 mujeres) a tenderse boca abajo sobre el asfalto para proceder a dispararles uno a uno, principalmente con tiros de gracia en la cabeza.
Las víctimas de la masacre fueron: Luis Ángel Gil, Tania Leonor Correa, Mercedes Rivera, Luis Arturo Cárdenas, Isidro Alba Guío, John Fredy Poveda, Luis Miguel Melo, Abel Cudris Rodríguez, Gonzalo Rincón, Luis Alejandro Pérez, José Antonio Monguí, Jairo Isidro Peña, Bertulfo Nova Arguello, Herminda Blanco de Peña y Hernando Gómez Garavito, conductor del bus de Cootracero.
Durante varios años la masacre de la Sarna permaneció en total impunidad, hasta el año 2008 cuando algunos paramilitares, miembros del bloque Autodefensas Campesinas del Casanare, empezaron a hablar sobre lo que realmente ocurrió.
Es así como ellos cuentan que esta masacre fue cometida por el grupo paramilitar conjuntamente con miembros de la fuerza pública quienes no solo facilitaron su paso, sino que además entregaron parte de las armas con las que ejecutaron a las víctimas. Narraron además cómo el grupo criminal contaba con apoyo de comerciantes de la región, así como de miembros del ejército, policía y otros organismos de seguridad del Estado.
eso no es justo
no buscan los responsables
No existe ningún asesinato justo, toda masacre es digna de repudio, pero hay que preguntarse porqué no se recuerda con la misma claridad y vehemencia las masacres realizadas por las farc y el eln? Porqué los homicidios selectivos cometidos por estos grupos terroristas quieren echarlos al olvido? Será porque al gobierno le conviene por el circo que está montando?